Verano 2014. Diario de un postoperatorio. Capítulo 1 o Todo va muuuuuy lento


Tengo la sensación de que desde el 8 de junio todo va muy lento. Normal, he pasado gran parte de los tres últimos meses sentado en el sofá mirando la pared o en tumbado en la cama mirando al techo. Gracias a que como dice mi amigo Paco Portero, "el practicar varios deportes hace que cuando estés lesionado puedas seguir haciendo otro deporte", he conseguido mantener la cordura, y sin haber profundizado en ninguna práctica si que he tocado muchos palos: música, trabajos manuales, lectura, redes sociales, colaboraciones en la radio, etc.

Lento el tiempo como mi recuperación. El infortunio de una segunda lesión, mucho más grave, aparatosa y desgraciada que la primera, hace que a estas alturas tenga que seguir realizando curas diarias, lleve solo dos sesiones de rehabilitación, y no pueda todavía marcar la fecha en el calendario para volver a correr, cosa que por ahora, tampoco es que me preocupe. Hoy para colmo llueve, muestra sin igual que he pasado de primavera a otoño, sin haber hecho propias mis actividades de verano más habituales.

Y ahora que empiezo a moverme, a veces sin muletas (de hecho ahora mismo no se dónde están), parece que todo va cogiendo ritmo habitual: septiembre y octubre son siempre meses que pasan muy rápido que este año serán progresivos y de adaptación.

Seguramente en una o dos semanas esté trabajando con normalidad, yendo al Club y al gimnasio por las tardes y caminatas los fines de semana. Puede que hasta entonces todo vaya pasando lento, muuuuuy lento.

Comentarios

Pedro Delgado Fernández ha dicho que…
No te preocupes que, como dicen los italianos, "piano piano si va lontano".
Un abrazo, que ya pasó lo peor.
Kiko Rodriguez ha dicho que…
Muchos animos, Toni. Aun te queda mucha guerra por dar.

Entradas populares