Camarero! - Qué! - Una de maratón! - ¿Una de maratón? Parte 2.

Al hilo de la entrada del 4 de julio, en la que hacía referencia a mi participación en alguna maratón del calendario español, comienzo a "destripar" los entresijos que me llevarían a tomar la salida en una u otra prueba de las antes anunciadas.

Valencia, la ciudad por descubrir

Cuando hace dos veranos mis vacacaiones en la costa levantina me llevaron a  fugazmente a Valencia me dije: aquí tengo que volver. El turismo deportivo es la mejor opción, por contra, no es agradable pasar viernes y sábado pateando  la ciudad antes de correr una maratón el domingo.

Las críticas a Valencia han sido siempre positivas, este año además se estrena fecha, pasa de febrero a noviembre, lo que va a ser sin duda en handicap en la participación. Un circuito muy  bueno, se vende como el más rápido de Europa, la realidad es que en 2010 el ganador hizo la segunda marca más rápida realizada en suelo español. Su participación ronda los tresmil atletas llegados a meta.

La próximidad en el tiempo, 20 de noviembre, me haría descartarla casi ya. Andaría un poco corto en la preparación teniendo en cuenta que parto de una base un poco pobre.


Málaga, la opción más fácil
Antonio Correa
La ventaja que supondría correr en Málaga es el ahorrarme un viaje. Circuito de sobra conocido, en el que el viento puede jugar una mala pasada, pero poder dormir en casa, llegar por la mañana, correr y volver a casa compensa bastante.

Como digo, circuito de sobra conocido, al igual de la posibilidad de formar pareja con mi compañero de Club Antonio Correa, 10º en 2010 con 2h44m. Juntos correríamos para bajar de 2h40; y un puesto en la primera página de las clasificaciones es bastante alentador.


Castellón, el circuito más llano del mundo


Si se dice de Valencia que es el circuito más rápido del Europa, Castellón presume de ser el del mundo. Su primera edición en 2010 no dió muestras de ello, pero tiene la puerta abierta para entrar entre las mejores maratones europeas.

Una posible esponsorización de mi marca de material deportivo favorita es el motivo que me puede llevar a correr en la ciudad plana.

Sevilla, las cuentas pendientes

El amigo Paco Portero en Sevilla 2009
Tampoco puedo decir que Sevilla no sea una buena opción. Conozco el circuito en su segunda parte. Creo que fue en el año 2000 cuando participé como "liebre" de dos atletas amigos del Club, Enrique Agüera, 2h37m; y Paco Romero Luna, 2h41.

Eran otros tiempos, yo venía de correr en 1h10 y ritmos de 3'45" no eran problema, así que estos amigos no dudaron en pedirme su ayuda para llevarlos desde la media maratón a meta. A Enrique lo "llevé" hasta la misma puerta del estadio, entonces me volví a buscar a Luna que venía un poco más retrasado.

A favor, la alta participación, garantías de gente de mi nivel. En contra, pasar un mal invierno entrenando de noche.

Barcelona, el tatuaje sextuple

Salva G. en Barcelona 2009
Una vez pensé que me haría un tatuaje alegórico a mis visitas a Barcelona, una tontería, pero con un significado. Esta opción es menos factible, pero todavía cuenta. Soy de la opinión que para coger un avión e ir a Barcelona, por poco más o menos, podría ir a cualquier maratón europea.

Ahora bien, la magia deportiva de la ciudad olímpica, referencias positivas por parte de amigos que han corriedo, y garantía hotelera por parte de Dani y Nuria.



Dicho queda. ¿Te ha gustado Álvaro?

Comentarios

desde La Caleta ha dicho que…
pues me quedo con la parte:
[...]por poco más o menos, podría ir a cualquier maratón europea[....]
:D
por todo lo alto?

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